Acuerdo por datos con Argentina frena compras de inmuebles
Alejandra Covello
La empresaria inmobiliaria argentina, referente con actividades en ambas márgenes del Río de la Plata, dijo en entrevista con El País que el eventual acuerdo de intercambio de información tributaria entre Uruguay y Argentina impacta en los inversores argentinos que no están comprando inmuebles y están a la espera de lo que ocurra entre ambos países. En cambio, remarcó que es importante el desembarco de brasileños y la decisión de uruguayos de invertir en productos de alta gama de entre US$ 400.000 y US$ 700.000.
PUNTA DEL ESTE | M. GALLARDO
-¿Cómo observa al mercado inmobiliario de Punta del Este?
-El mercado inmobiliario está bastante frenado para los argentinos en general por el tema de las medidas conocidas por todos. Salvo las cosas que se están pagando en cuotas y en valores por unos 200.000 dólares, el resto está muy frenado. Tenemos una gran movida de los brasileños que muestran un cambio sustancial en el consumo y diría que los productos de mayor valor los están comprando los uruguayos. Es muy bueno esto porque las mejores unidades las están comprando los uruguayos. En realidad, el mercado está sobreofertado. Hay setenta y nueve proyectos a la venta. De alguna manera esto se tiene que solucionar. La tendencia indica que las cosas tienen que alcanzar cierto equilibrio.
-¿A qué medidas se refiere, a los controles cambiarios del gobierno argentino, o al acuerdo de intercambio de información tributaria entre Uruguay y Argentina?
-Las medidas argentinas ya estaban hechas. El tema del acuerdo de intercambio de información tributaria impacta. Hay mucha gente que dice que está pensando por las medidas de acá. El tema está frenando la toma de decisiones a pesar que los productos gustan, van a todos los cócteles pero cuando se enteran del tema del secreto la cosa se complica mucho (N. de la R.: la posibilidad que la Administración Federal de Ingresos Públicos pida datos de inversiones de argentinos en Uruguay). En general el argentino no sabe cómo son las leyes acá. No tiene un pleno conocimiento de estas cosas. "Vamos a esperar a ver qué pasa", responden cuando los invitamos a invertir. Esto dilata todo y frena muchísimo la actividad.
-¿Qué se vende hoy en Punta del Este?
-Los productos que se venden son los que tienen marca y trayectoria. Para los otros el mercado está durísimo. Si se trata un producto de Invergroup S.A. o de Stiller S.A. la gente compra. Pero si te vendo algo de un NN que hoy está saliendo al mercado, que nadie lo conoce, que está empezando, es más difícil aunque tenga el mejor proyecto del planeta.
-¿Cómo pesa la trayectoria del desarrollista a la hora de decidir una venta?
-Muchísimo. Más que nunca hoy en Punta del Este influyen tanto las marcas como las trayectorias de los desarrollistas inmobiliarios.
-¿Qué pasó este verano con los clientes europeos y norteamericanos?
-Llegaron los europeos de alta gama que están invirtiendo mucho en José Ignacio. En el caso de los desarrollistas europeos que habían llegado hace algún tiempo no quedó casi ningún español en la vuelta. Salvo el desarrollista español de Selenza no quedó ninguno. Los norteamericanos llegaron pero alquilaron. Con ellos no concretamos ni una sola venta. Solo alquileres.
-La gente comenta mucho sobre la gran cantidad de edificios en construcción. Usted expresó que el mercado está sobreofertado. ¿Los precios se van a mantener de todas formas, aumentarán, bajarán?
-No creo que bajen, entre otras cosas, porque los costos están muy altos. El costo de la construcción subió y las tierras se valorizaron muchísimo. Por lo cual creo que se mantendrán. Además, las inversiones se concretan con capital propio. No con préstamos bancarios. Esto hace que la mercadería se mantenga. Quizás el índice de rotación será mucho más lento pero no quiere decir que baje el precio. No puede bajar porque el costo sería más alto que el precio final. Como se trata de inversiones tangibles puede suceder que un edificio no se venda en un año y quizás se venda en tres. Pero el material no va a bajar.
-¿Qué valor del metro cuadrado maneja usted?
-Un promedio de tres mil dólares el metro cuadrado de construcción premium. En el caso de edificios de más de 150 unidades la venta total tarda lo mismo que su construcción. Sucede que hay gente que no define la compra hasta que el edificio no esté terminado.
-¿Qué otros aspectos influyen para que los valores se mantengan?
-Creo que los precios se van a mantener. Siempre y cuando se cumpla con la condición de que Punta del Este se convierta en una ciudad de invierno. No sólo del verano, sino de todo el año. Todos los edificios se están preparando para contar con amenidades y servicios para todo el año. Va a haber gente que va a venir a vivir acá. Punta del Este tiene que tener algún tipo de equipamiento en el invierno para que cuando la gente venga no se sienta que está en la nada.
-¿Qué tipo de equipamiento?
-Un tema que se debe mejorar es el transporte. Si bien toda la gente que está comprando tiene su vehículo, para la gente que trabaja es muy difícil. Si no tienen una moto no pueden trabajar. No van a Punta del Este porque no tienen forma de llegar. Todo el equipamiento debe ser para atender al público en el invierno y que los trabajadores puedan trasladarse.
-Cuando se refiere a los compradores uruguayos, ¿de qué rango de inversión estamos hablando?
-Hablamos de un rango a partir de los 400.000 dólares hasta los 700.000 dólares. Hay algunas excepciones pero hablamos en general.
-¿Concretó alguna venta por una cifra millonaria, de esas que conmueven el mercado?
-Estamos a la expectativa. Tenemos los penthouses de la torre Acuarela a partir de 1.800.000 dólares. Tenemos la oferta de un inversor brasileño que esperamos concretarla en el feriado de Carnaval. Ventas interesantes, para decir que estoy muy contenta, no concreté ninguna.
PUNTA DEL ESTE | M. GALLARDO
-¿Cómo observa al mercado inmobiliario de Punta del Este?
-El mercado inmobiliario está bastante frenado para los argentinos en general por el tema de las medidas conocidas por todos. Salvo las cosas que se están pagando en cuotas y en valores por unos 200.000 dólares, el resto está muy frenado. Tenemos una gran movida de los brasileños que muestran un cambio sustancial en el consumo y diría que los productos de mayor valor los están comprando los uruguayos. Es muy bueno esto porque las mejores unidades las están comprando los uruguayos. En realidad, el mercado está sobreofertado. Hay setenta y nueve proyectos a la venta. De alguna manera esto se tiene que solucionar. La tendencia indica que las cosas tienen que alcanzar cierto equilibrio.
-¿A qué medidas se refiere, a los controles cambiarios del gobierno argentino, o al acuerdo de intercambio de información tributaria entre Uruguay y Argentina?
-Las medidas argentinas ya estaban hechas. El tema del acuerdo de intercambio de información tributaria impacta. Hay mucha gente que dice que está pensando por las medidas de acá. El tema está frenando la toma de decisiones a pesar que los productos gustan, van a todos los cócteles pero cuando se enteran del tema del secreto la cosa se complica mucho (N. de la R.: la posibilidad que la Administración Federal de Ingresos Públicos pida datos de inversiones de argentinos en Uruguay). En general el argentino no sabe cómo son las leyes acá. No tiene un pleno conocimiento de estas cosas. "Vamos a esperar a ver qué pasa", responden cuando los invitamos a invertir. Esto dilata todo y frena muchísimo la actividad.
-¿Qué se vende hoy en Punta del Este?
-Los productos que se venden son los que tienen marca y trayectoria. Para los otros el mercado está durísimo. Si se trata un producto de Invergroup S.A. o de Stiller S.A. la gente compra. Pero si te vendo algo de un NN que hoy está saliendo al mercado, que nadie lo conoce, que está empezando, es más difícil aunque tenga el mejor proyecto del planeta.
-¿Cómo pesa la trayectoria del desarrollista a la hora de decidir una venta?
-Muchísimo. Más que nunca hoy en Punta del Este influyen tanto las marcas como las trayectorias de los desarrollistas inmobiliarios.
-¿Qué pasó este verano con los clientes europeos y norteamericanos?
-Llegaron los europeos de alta gama que están invirtiendo mucho en José Ignacio. En el caso de los desarrollistas europeos que habían llegado hace algún tiempo no quedó casi ningún español en la vuelta. Salvo el desarrollista español de Selenza no quedó ninguno. Los norteamericanos llegaron pero alquilaron. Con ellos no concretamos ni una sola venta. Solo alquileres.
-La gente comenta mucho sobre la gran cantidad de edificios en construcción. Usted expresó que el mercado está sobreofertado. ¿Los precios se van a mantener de todas formas, aumentarán, bajarán?
-No creo que bajen, entre otras cosas, porque los costos están muy altos. El costo de la construcción subió y las tierras se valorizaron muchísimo. Por lo cual creo que se mantendrán. Además, las inversiones se concretan con capital propio. No con préstamos bancarios. Esto hace que la mercadería se mantenga. Quizás el índice de rotación será mucho más lento pero no quiere decir que baje el precio. No puede bajar porque el costo sería más alto que el precio final. Como se trata de inversiones tangibles puede suceder que un edificio no se venda en un año y quizás se venda en tres. Pero el material no va a bajar.
-¿Qué valor del metro cuadrado maneja usted?
-Un promedio de tres mil dólares el metro cuadrado de construcción premium. En el caso de edificios de más de 150 unidades la venta total tarda lo mismo que su construcción. Sucede que hay gente que no define la compra hasta que el edificio no esté terminado.
-¿Qué otros aspectos influyen para que los valores se mantengan?
-Creo que los precios se van a mantener. Siempre y cuando se cumpla con la condición de que Punta del Este se convierta en una ciudad de invierno. No sólo del verano, sino de todo el año. Todos los edificios se están preparando para contar con amenidades y servicios para todo el año. Va a haber gente que va a venir a vivir acá. Punta del Este tiene que tener algún tipo de equipamiento en el invierno para que cuando la gente venga no se sienta que está en la nada.
-¿Qué tipo de equipamiento?
-Un tema que se debe mejorar es el transporte. Si bien toda la gente que está comprando tiene su vehículo, para la gente que trabaja es muy difícil. Si no tienen una moto no pueden trabajar. No van a Punta del Este porque no tienen forma de llegar. Todo el equipamiento debe ser para atender al público en el invierno y que los trabajadores puedan trasladarse.
-Cuando se refiere a los compradores uruguayos, ¿de qué rango de inversión estamos hablando?
-Hablamos de un rango a partir de los 400.000 dólares hasta los 700.000 dólares. Hay algunas excepciones pero hablamos en general.
-¿Concretó alguna venta por una cifra millonaria, de esas que conmueven el mercado?
-Estamos a la expectativa. Tenemos los penthouses de la torre Acuarela a partir de 1.800.000 dólares. Tenemos la oferta de un inversor brasileño que esperamos concretarla en el feriado de Carnaval. Ventas interesantes, para decir que estoy muy contenta, no concreté ninguna.
El País Digital